El café torero de Janice Vidal puso el broche de oro a una Feria que este domingo albergó una impresionante concentración de coches clásicos en la Plaza Mayor donde se celebró un taller infantil de cocina de orejas de carnaval y una degustación de puerros de Sahagún que ofreció el Consistorio facundino
Con las vistas puestas en la 103ª edición, la organización de la Feria agradece a expositores, vecinos, comarcanos y visitantes por su compromiso y apoyo a una muestra centenaria que sigue creciendo y consolidándose como la cita clave del calendario ferial coyantino y una de las más importantes de toda la provincia de León
ELa 102ª Feria de Febrero ha tocado a su fin en una soleada mañana de domingo con miles de personas circulando por las calles de Valencia de Don Juan.
Además de la carpa situada en la Plaza Mayor dedicada a los productos agroalimentarios, destacando entre todos ellos los leoneses, el atractivo de la exposición de coches clásicos dio lustre al último día de la muestra centenaria.
Un taller de elaboración de orejas para niños de entre 5 y 12 años y una degustación de puerros ofrecida por el Ayuntamiento de Sahagún completaron una programación que concluyó con la actuación de Janice Vidal que animó la Calle Mayor en el segundo café torero con acento musical local tras el éxito de ayer del cantautor coyantino Moris.
La organización de la Feria agradece a expositores, vecinos, comarcanos y visitantes por su compromiso y apoyo a una muestra centenaria que sigue creciendo y consolidándose como la cita clave del calendario ferial coyantino y una de las más importantes de toda la provincia de León que pone ya sus vistas en la 103ª edición y trabaja ya pensando en las mejoras que se implementarán en 2024.
El alcalde de la localidad, Juan Pablo Regadera Rodríguez, también hizo balance de la muestra y concluyó que «ponemos punto y final a esta 102ª Feria de Febrero, éxito de participación y de visitantes gracias al magnífico fin de semana que nos ha acompañado. Un evento que apuesta por una combinación ganadora, la de la tradición y la innovación, que une, que reencuentra y que acerca este medio rural a todos los que no viven en él».
Regadera Rodríguez quiso, por último, «agradecer de corazón a todos los que han aportado su granito de arena en su organización y desarrollo, y por supuesto a todos los expositores que nos han acompañado. Haremos en futuras ediciones todo lo posible para dar cabida a los que lamentablemente no hemos podido acoger en esta edición por falta de espacio y seguiremos trabajando para que esta feria siga siendo un referente en el noroeste de la península y una cita obligada con Valencia de Don Juan».